domingo, 13 de octubre de 2013

PELEANDO DE BROMAS


Si nos atacan, ¿cómo debemos reaccionar? ¿Es mejor el ataque o la defensa? ¿Se puede adaptar un arte marcial al bienestar personal? Los expertos en Mugendo vascos llevan casi 3 décadas dando respuestas a estas interrogaciones, con ahínco, reciclaje y mucha vocación pedagógica



Texto y fotos: Cristina M. Sacristán



El profesor alecciona a los jóvenes mugendokas sobre distancias y protecciones.



  Todo empezó porque Meiji Suzuki, al vivir en Inglaterra, se dio cuenta de que el kárate de su país natal era demasiado cerrado, sin evolución. De su inquietud por desarrollar un arte marcial abierto, que permitiera movimientos más libres, nació el mugendo que, de hecho, es traducible como "camino ilimitado".

  Más conocido en Catalunya -y especialmente en países como Inglaterra, Irlanda, EE.UU. e Italia-, en el País Vasco va cobrando arraigo en estos últimos años, y no es de extrañar, si nos atenemos a la energía y entusiasmo que le ponen el maestro Jesús Mª Platón y su equipo de senseis (profesores) a impartir esta disciplina deportiva desde tiernas edades, con fines "pedagógicos, educativos", desde el interés de que sus practicantes se sepan defender ante un ataque, pero no promoviéndolo.



Dos de los veteranos vascos, en un entrenamiento colectivo.

 
  Así, de sus practicantes, no todos compiten y se guían por priorizar la defensa sobre el ataque. Y el ambiente en el que se mueven es de compañerismo y buen rollo. Un buen ejemplo de ello es la sempai (profesora) Itxaso, quien además de maestra infantil asesora a los pequeños, sonriente y dulcemente, sobre cómo ponerse los petos, los cascos, espinilleras, etc. (los niños no pueden tocarse la cara). En general, se manifiestan viajeros, no sólo por sus competiciones nacionales e internacionales, sino además porque les gusta relacionarse con colegas de otros países. Así que son grandes usuarios de Skype...

  Como indica su nombre, en Mugendo hay más de 200 movimientos, y combinaciones de técnicas, pares, ataques... Sería una metodología "abierta, en constante desarrollo", relata Platón. Cuentan con un total de 12 cinturones y su pedagogía está personalizada -"que el arte marcial se adapte a la persona, y no al revés", dicen sus promotores-. El master prevalece sobre los senseis, éstos sobre los sempais y finalmente están los instructores y los asistentes. El master Platón habla de "escuchar a tu cuerpo, a tu emoción; cómo respiras, cómo te sientes..." y dejar que todo fluya. El cuerpo, dice, "es el espacio donde habitan nuestras experiencias, nuestra casa...". El experto, que ha viajado por todo el mundo, y sigue, para recabar y cotejar las mejores técnicas, habla de educación, de fomentar el respeto en el tatami. "El saludo en mugendo es, físicamente, de corazón a corazón", escenifica. "Da igual que ganes o pierdas".




Parte del equipo de Mugendo Euskadi en un encuentro Interclubes, antes del verano.



  En este sentido, las escuelas vascas -que partieron de cero en Amurrio (Alava) hace 29 años- trabajan el desarrollo técnico, el desarrollo personal y el desarrollo emocional, "con confianza y cariño". Así, cada vez más padres llevan a sus hijos a practicarlo, desde pequeños, para que obtengan disciplina, sepan defenderse y sientan bienestar. Siempre desde el compañerismo y el respeto y ayuda al que es menos hábil.

  Así lo verifican Ninbe Markinez y su viajera familia, quienes gustan de relacionarse con otros pequeños practicantes de mugendo de aquí y de otras partes del mundo. Ninbe es una jovencísima cinturón negro vizcaína con maneras de niña nórdica o centroeuropea: música, educada, de mirada inteligente y respuestas rápidas. Como cuando está sobre el tatami...

  La idea es que el deportista "se realice", que no haga nada que le haga sentir mal. Y que se sepa defender, subrayan. En esta línea constructiva, los profesores organizan clases anti-bullying, defensa personal para féminas, ayuda a Unicef... El 25 de noviembre se alían con las mujeres, hoy han celebrado el Wopato Solidario, el próximo sábado 19 tendra lugar el campeonato Interclubes... El mugendo, aseguran, ayuda a canalizar los miedos, además de que socializa y genera endorfinas. Por ello, tienen una gran fe en que es de una buena ayuda para los adolescentes desorientados.



Tranquilidad y seguridad. Dos metas del mugendo.
 



Para más información: La mejor defensa no es un buen ataque  (ON, julio 2013. Pags. 30-32)
Escuelas Mugendo en el País Vasco
Dossier sobre terapias alternativas  (Euskal Herria, 2011)
Los numerosos beneficios del Aquagym (ON, enero 2014). Otras noticias de Salud y Ciencia en el Apartado Trabajos de este blog


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